Desde hace más de un siglo, los grandes acontecimientos deportivos van acompañados de imágenes. Con el auge de la fotografía amateur a finales del siglo XIX, coincidiendo con los primeros Juegos Olímpicos modernos en 1896, la fotografía y el deporte evolucionaron de la mano en muchos sentidos. La visibilidad que se da a los acontecimientos deportivos pasa necesariamente por la imagen fotográfica. En busca del rendimiento, combinando esfuerzo con gestos, la práctica del deporte responde a reglas precisas y da espectáculo cuando se realiza con vistas a una competición. La presentación del deporte es retransmitida por los fotógrafos que se desplazan por el estadio.
Desde hace más de cien años, el espectáculo deportivo es difundido por los medios de comunicación. Las imágenes que transmiten las hazañas y promocionan a los campeones atraen a una multitud cada vez mayor y ganan una audiencia cada vez más global. El rendimiento deportivo, en el que se centran las cámaras, se convierte en la demostración de un modelo social. Observado y practicado en todas partes, ya sea en las zonas más industrializadas o remotas del mundo, el deporte para espectadores se ve impulsado a un mundo mediático, económico y político. Sin lugar a dudas, la fotografía jugó un papel esencial en este proceso de movilización de una audiencia masiva.
Durante las competiciones importantes, las fotografías están diseñadas para llamar la atención sobre las actuaciones de los atletas. Al explorar un patrimonio fotográfico en gran parte inédito, la exposición revela la gramática visual de la fotografía deportiva a través de varios temas: la cobertura mediática que comenzó en Atenas en 1896; la técnica que busca capturar el movimiento a través de fotogramas congelados; la composición que influye en la narrativa visual y construye la celebración del deporte; las figuras que se desarrollan en el estadio donde los deportistas se enfrentan a un público embargado por las emociones; y fotógrafos que utilizan la fotografía deportiva como pura documentación de la hazaña y otros como medio artístico. Los numerosos focos nos ofrecen una historia que pone de relieve la fotografía del deporte y de los Juegos Olímpicos en particular.