Se llaman Babsi, Sam o Uschi. Son los protagonistas de los cuadros de Clemens Wild. Sus siluetas y poses, con cigarrillos, peinados y trajes coloridos, conforman una galería de mujeres con el destino dañado, pero dignas y sin complejos. Comparten trabajos humildes, una posición social precaria, orígenes lejanos y cuentan su historia, sus preocupaciones, sus ambiciones y sus aficiones.
Clemens Wild permite a las mujeres que trabajan en las sombras salir de la invisibilidad social. En solidaridad, el propio autor experimentó la marginación. Desde 1982 vive en la Humanushaus, una residencia social antroposófica situada cerca de Berna (Suiza). Fue observando a las mujeres que trabajan en la cocina, apartamentos y talleres de esta institución para personas con discapacidad que se le ocurrió la idea de rendirles un homenaje.
Procedente de una familia de libreros, Clemens Wild (1964) ha cultivado la pasión por el dibujo y las historias imaginarias desde pequeño. Las ficciones que le gusta escribir y dibujar son para él una forma de entender el mundo que le rodea. Entre las mujeres que componen su galería, algunas regresan regularmente desde hace unos cuarenta años. El autor los representa de forma frontal y estática, o realizando tareas cotidianas en sus lugares de trabajo: cocina, aseos, talleres, etc. Charlan en las pausas para el café, esperan en la parada del autobús. Clemens Wild se preocupa de darles una personalidad única: sus trajes nunca obedecen a los estándares de la ropa de trabajo estandarizada, sino que se diferencian entre sí, sin dejar de ser realistas y funcionales. Ningún detalle escapa a su sentido de observación, entrenado durante años en el microcosmos de la Humanushaus.
El autor utiliza todo tipo de formatos y soportes que colecciona: papel kraft, hojas A4, tapas de cajas de cartón o pequeñas bolsas de papel. También escribe textos en los que se presentan sujetos femeninos. Además de dar vida a cada personaje, estas caligrafías de rotulador negro dialogan con la imagen y la completan, dándole un fuerte impacto visual.
Desde 2012, Clemens Wild asiste al taller de Bernese Rohling. Gracias a la infraestructura de que dispone en el lugar, los encuentros con otros artistas, las exposiciones y los viajes en los que participa, su práctica artística ha crecido, se ha vuelto más compleja y su crítica social se ha generalizado.
La Collection de l'Art Brut, que adquirió doce obras de Clemens Wild en 2024, presenta por primera vez un gran conjunto de sus creaciones, en el marco de esta exposición monográfica.
Comisaria: Teresa Maranzano, historiadora del arte.